martes, 26 de julio de 2011

AMARTE



Ya no sé cuánto tiempo ha pasado, ni cuánta es la lejanía que nos separa, mi pecho hundido en la melancolía de tu ausencia, se asfixia de tanto reciclar el aire de tus recuerdos.

A dónde te fuiste,  ya nunca podré saber el porqué de tu partida.

Ahora soy yo el que parte, no como tú, a la cómoda sensación de una soledad autocomplaciente, no, yo me voy más lejos aún, me voy a un mundo al que pocos han decidido ir por cuenta propia, me voy a donde jamás podré verte de nuevo.

No quieras persuadirme ahora de que no lo haga, ya nada puede hacerme cambiar de opinión, pues sin ti, de nada me sirve estar en este mundo, sin ti mi único deseo es partir.

Y no creas que esto es parte de un chantaje, una maniobra desesperada para que vuelvas a mí, no. Si de algo estoy convencido es que tu partida fue algo definitivo y permanente, me dejaste sabiendo que sin ti no podría seguir viviendo.

Es mi turno de mover las piezas y esta es mi jugada final en este mundo, se trata de una decisión por mucho tiempo postergada, que también es definitiva y permanente.

Es este un viaje sin retorno, parto hacia la nada, hacia el vacío inmenso, hacia le eterna penumbra, hacia el amargo frío de un mundo desconocido y ajeno.

No…! no quieras detenerme! pues ya he firmado todos los documentos que me comprometen a hacerlo, he donado mi cuerpo a la ciencia y ya no hay vuelta atrás, esta misma noche es mi partida, me marcho de un mundo donde mi amor por ti no es posible.

Me voy a donde jamás volveré a verte, me voy A MARTE. 

 P.D: El cohete despega esta misma noche, perdona que no haya podido llamarte.

Saludos.

(ah… creo que por el apuro le faltó un espacio al título)

No hay comentarios:

Publicar un comentario